Diferentes clases de hosting: compartido, dedicado y VPS.
En los planes de alojamiento compartido, también llamado web hosting, diferentes usuarios y páginas web comparten los recursos de un ordenador de alto rendimiento, calificado como servidor. El proveedor se ocupa de la administración del servidor, por lo que no requiere conocimientos de administración de sistemas. Es la mejor alternativa para iniciarse en internet, ya que los planes de hosting compartido son muy económicos, fáciles de manejar y sus características son suficientes para la mayoría de las páginas web.
En los VPS (Servidores Privados Virtuales), las tecnologías de virtualización fraccionan los recursos de un servidor físico, que trabaja como varias máquinas con total independencia, sin compartir los recursos entre los usuarios. El usuario entra en el sistema y lo administra con una facilidad comparable a la de un dedicado y tiene un menor gasto.
En el alojamiento dedicado, cada servidor es usado por un único usuario, que administra los recursos de la máquina y puede instalar cualquier aplicación o sistema operativo. El proveedor se ocupa del mantenimiento físico del servidor. Es la mejor opción para las empresas y profesionales que hacen mucho uso de internet y necesitan aplicaciones muy concretas o consumen muchos recursos de espacio en disco y transferencia.
Espacio en disco.
Una página tiene distintos componentes: imágenes, textos, base de datos… El espacio en disco o espacio web es la capacidad de almacenamiento reservada para una página web en el disco duro de un servidor.
Para computar el espacio en disco necesario para una página web, habría que sumar el tamaño de los archivos que se quieren publicar y aumentarlo en un 30% más en previsión del crecimiento.
Los proveedores suelen dar un sistema de aviso por correo electrónico que advierte al usuario cuando su espacio en disco está cerca del límite.
Transferencia mensual.
Cuando un internauta visita una página web, los datos del servidor se transfieren hasta el ordenador del usuario. Este flujo de datos se llama transferencia. Cuantas más visitas reciba una página web, así como cuanto más espacio en disco ocupen los archivos que se van a descargar, más transferencia se consume. Por ello, habría que hacer una previsión de los internautas que accederán a un website. De la misma manera que ocurre con el espacio en disco, habría que añadir un 30% más y configurar los sistemas de aviso del proveedor.
Sistema operativo, programación y base de datos.
El sistema operativo del servicio de hosting establece las aplicaciones que se pueden usar en una página web, como lenguajes de programación o bases de datos.
También, los proveedores suelen añadir, a sus planes de web hosting, aplicaciones que permiten crear y actualizar fácilmente una página web.
Gestión FTP.
El FTP, Protocolo de Transferencia de Archivos, es necesario para transferir archivos entre ordenadores y servidores. Además de compartir datos, el usuario puede actualizar la página web con nuevos contenidos.
Puede hacerse con programas instalados en cualquier ordenador. Algunos proveedores posibilitan el hacerlo a través de una aplicación online a la que se accede desde el Área de Cliente.
Cuentas de correo.
El correo electrónico es una de las ventajas más destacadas de tener una página web con dominio propio. Las cuentas o los buzones de correo electrónico hacen que los empleados de una empresa tengan su propia cuenta de correo electrónico.
Lo más óptimo para el usuario es que el espacio en disco para el correo sea independiente del espacio web del servidor de alojamiento de la página web. También es recomendable optar por un proveedor que ofrezca transferencia de correo ilimitada.
En la configuración del correo, hay que tener en cuenta que se puede elegir entre descargar los mensajes en el ordenador (protocolo POP3), por lo que no ocupan espacio en disco, o mantener los mensajes en el servidor de correo (protocolo IMAP4).
Área de Cliente y Panel de Control.
Son los instrumentos necesarios que, a través de internet, posibilitan el gestionar los servicios de hosting y la relación administrativa con el proveedor.
A través del Área de Cliente, las consultas llegan al departamento de atención al cliente de los proveedores para resolver cualquier duda.
Desde el Área de Cliente (o a través de una dirección web segura), el usuario puede entrar en el Panel de Control de cada servicio de hosting, que posibilita el gestionar los recursos técnicos.